Thania, la hija de nuestros sueños

Por fín puedo escribir, iba tan lentísimo el ordenador, que el hacer una nueva entrada se había convertido en una pesadilla, allá voy.

Cómo bien dice la entrada, LA HIJA DE NUESTROS SUEÑOS, se hizo realidad hace 8 años.
Fué el maravilloso 8 de Octubre del 2001. Ahí empezó nuestra maravillosa historia.

Después de cuatro años y cuatro meses de horrible espera, nos llamaron para comunicarnos, que una princesa morena de ojos café con leche, con tres añitos y tres meses, nos esperaba al otro lado del océano,en el País que habíamos elegido para tener a nuestra hija. Y digo tener, ya que nuestro expediente llega a la Casa Cuna de Ciudad de México, en el mismo mes que ella nació, en Febrero de 1998, dos meses después ella seria abandonada y tres años más tarde pudimos ir a por ella. Siempre me ha dado muchísima pena que halla tenido que estar allí metidita tanto tiempo y nosotros aquí, cansadísimos de esperar, pedíamos a gritos, que por favor, que nos dijeran algo, aunque fuera un NO. Pero nada, siempre nos decían lo mismo en la Ecai, "no sabemos nada".
Pero llegó ese día mágico y solo escuché a través del teléfono la voz de Manolo, "tiene tres años y tres meses y se llama Thania", así tal cuál. Me quedé de piedra y sólo tenía ganas de gritar, pero por verguenza no chillé, estaba comprando en un supermercado y lo que me acuerdo es de que me temblaba todo. POR FIN IBA A SER MAMA. Llevávamos 15 años casado y muchos intentándo formar una familia y Thania llegó para que nuestro sueño se hiciera realidad.

Allí tuvimos que estar 54 días. Los primeros 21 la recogiámos a las 12 y la devolvíámos a las 6 de la tarde. Fueros 21 días duros pero buenos, nos fuímos adaptando un poquito cada día. Al princio ella sólo quería volver a la "sala" con sus amiguitos, pero cuándo fué cogiéndo confianza, ya le costaba trabajito entrar.

Tuvimos el juicio el día 31, un día después de que Manolo cumpliera años, el primero con su niña, y creo que eso a la jueza le llenó y dejó que desde ese día saliera de la Casa cuna y viviera con nosotros hasta que nos dieran la resolución. Esta llegó el 12 de Noviembre, pero tuvimos que quedarnos hasta el día 1 de Diciembre, que ya con todo arreglado y sellado, pudimos viajar para casa con nuestro sueño a nuestro lado.

Fueron los 54 días más impresionantes y maravillosos que unos padres puedan imaginarse. Días y días llenos de ese amor que teníamos guardado y que tanto anasiábamos dar. Un amor que nos quemaba y que a ella se lo entegamos sin mesura, solo queríamos que supiera lo que la queríamos y lo que habíamos luchado por tenerla. Llevo ocho años dándole las gracias por dejarme ser su madre. Es un ser admirable, tanto por lo que le ha tocado vivir y de como ha sabido sobre llevarlo.

Es una niña feliz, me lo dijo el otro día el director de su colegio. Se le ve en la cara y eso hace que yo también lo sea.

Esta foto es del día siguienta de conocerla. Tuvimos que hacérsela y
llevarla junto a un certificado que nos acrediba como padres en proceso de adopción, por si nos paraba la policia. Tenemos el certificado guardado con todo su expediente, pero sobre todo, guardado en nuestro corazón.

Te queremos mi niña.